PERSONAJES
God
Warriors - Guerreros Divinos
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FREYA/FLARE/FLAME/FLEUR
Edad: Desconocida, 17 años aprox.
Altura: Desconocida, 1,64 m aprox.
Peso: Desconocido, 45 Kgs aprox.
Fecha de nacimiento: Desconocida
Grupo sanguíneo: Desconocido
Origen: Asgard
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NOTA:
En lo que se refiere a los personajes añadidos por el
anime, no hay ninguna indicación oficial de su edad, peso, altura
etc..
Freya / Flare.
(フレア, pron. jp. Furea) es la hermana pequeña de Hilda de Polaris. Después
de ser la primera persona (aparte de Alberich) que se da cuenta del cambio
drástico de personalidad de su hermana, ella busca a Saori y sus Saints
para que la ayuden. Tras liberar a Hyōga de la cárcel (él había sido enviado
como explorador a Asgard y fue capturado) y huir con él es calificada
como traidora. Ella estaba profundamente entristecida por la batalla,
ya que no quería que Merak Hägen, su guardaespaldas y mejor amigo de la
infancia, y Cygnus Hyōga, su primer amigo entre los Bronze Saints.
Tanto en el film 2 como el la teleserie
dedicados a Asgard, está presente un personaje femenino inspirado en Freyja
(Flare en la saga del anime, y Freya en la oav), diosa del amor, la fecundidad
y la fertilidad en la mitología escandinava. En la mitología nórdica Freya
era una diosa mayor, rubia de ojos azules, era la mas bella de todas las
diosas, diosa del amor, la belleza, la fertilidad y la fecundidad. Era
la hermana del dios Frey.
ETIMOLOGÍA
DEL NOMBRE :
Freya : Su nombre se inspira en Freya,
la diosa del amor y la belleza en la mitología nórdica, aunque en el doblaje
occidental se cambió su nombre a Flare e incluso Flame.
ESTADÍSTICAS
DEL TAIZEN :
Al
ser un personaje exclusivo del anime no dispone de ficha en el “Taizen”
(Enciclopedia of Saints) que
es una recopilacion de datos del manga exclusivamente.
TÉCNICAS
DE COMBATE :
Flare
no posee poderes ni capacidades de guerrero, no dispone de cosmos, pero
como todas las mujeres de Asgard tiene una considerable resistencia al
frío. Ella conoce perfectamente el palacio real y el reino, y por supuesto
los guerreros divinos del Norte.
PERFIL PSICOLÓGICO
:
Flare
nació en una familia noble de Asgard, sería la hermana menor de aquella
que algún día se convertiría en una sacerdotisa de Odín y regente del
reino, es decir, Hilda de Polaris. Esta situación le permitió vivir una
infancia fácil y feliz, en su mayoría dedicada a los juegos y al entretenimiento.
Su amigo favorito era un niño llamado Hagen, con quien pasó muchos días,
jugando con la nieve, y comenzó a desarrollar un profundo afecto por él.
Poco
a poco, los años comenzaron a pasar, y Hagen decidió iniciar un entrenamiento
para convertirse en un God Warrior de Asgard y así proteger a Flare y
su tierra en caso de emergencia. Flare, delicada y sensible, respeta su
decisión, pero temía por sus duras condiciones de formación, sobretodo
porque Hagen decidió entrenarse en un lugar insólito de Asgard: una cueva
volcánica donde las altas temperaturas eran difíciles de soportar. Varias
veces, la niña fue a ver su formación para animarlo y curarlo cuando se
hería, temiendo siempre por su vida. De todos modos, Flare nunca dejó
de apoyar a Hagen para que lograra su objetivo y se convirtiera en un
guerrero divino.
Con
los años, la relación entre Hagen y Flare se freforzó mucho y se hizo
muy intensa, incluso si la chica aun no estaba del todo segura de sus
propios sentimientos hacia el amigo que vivía con ella en el palacio.
Adolescente, pero todavía confiada en la paz de Asgard y convencida ingenuamente
que nunca serían necesarios sus guerreros, Flare continuó pasando tiempo
con él, Hilda y Siegfried, otro guerrero divino mayor que Hagen, za quien
la muchacha ya conocía por su reputación dado que había logrado matar
al dragón que asoló el norte del país, y con su humedecimiento en la sangre
de la bestia su piel se había hecho invulnerable. A pesar de su corta
edad, Flare era consciente de los problemas relacionados con el clima
glacial en el norte de Asgard, pero había aprendido a aceptar y disfrutar
de los pocos y raros días de primavera. También durante esa época, Flare
había oído hablar de Atenea, la diosa de la justicia que gobernaba las
tierras soleadas de Grecia y sus Caballeros del Zodíaco, que acababan
de salvar la paz en la tierra después de una guerra entre sus propias
filas. Estas historias la inspiraron, llevándola a confiar en Atenea,
aun no habiéndola conocido personalmente.
Poco
a poco, Flare empezó a conocer a otros posibles guerreros divinos que
frecuentaban el palacio, entre los cuales uno llamado Alberich. Cuando
este último fue expulsado por Hilda haberla engañado y traicionado con
la astúcia de la que estaba dotado, Flare, por compasión, trató de convencerlo
de que pidiera perdón a su hermana, pero Alberich, impulsado por el orgullo,
se negó.
Poco
tiempo después, extraños sucesos ponen fin a la paz de Asgard. Una noche,
Flare se dio cuenta que en el dedo de Hilda un extraño anillo de oro que
nunca antes había visto, y la mujer había cambiado casi simultáneamente
de actitud, mostrando sus nuevos deseos de conquista y declarando la guerra
a Atenea para obtener territorios más cálidos para su pueblo. Inmediatamente
Flare sospechaba que se había producido un cambio, y trató en vano de
hacer entrar en razón a Hilda, a continuación, trató de convencer a Hagen
y Siegfried que no la siguieran, pero ambos la ignoraron, obligados por
los deberes relacionados con su rango. Hilda dejó de ejercer sus funciones
hacia Odin y como resultado el hielo de Asgard y los Polos había empezado
a deshacerse con el consiguiente aumento del nivel del mar, causando inundaciones
y desastres.
Cuando
la guerra contra Atenea ya parecía inevitable, Flare desesperada volvió
a hablar con Hilda, sin embargo, esta la hizo encerrar en las mazmorras
del palacio. Esta esclavitud fue providencial, porque Flare sabía que
un joven había sido capturado acusado de espionaje, y que se encontraba
en muy mal estado después de haber sido torturado para hablar.
Tras
curar sus heridas, Flare vio la pureza en sus ojos y comprendió que se
trataba de un Saint de Atenea. Convencida de que podría prevenir la guerra
y hacer que Hilda volviera a ser la de antes, Flare solicita a Hyoga del
Cisne que la lleve junto a Atenea.
Los dos escapan del palacio juntos. Descuidada por lo que equivalía a
traición, Flare es guiada por Hyoga hasta Atenea, venida a Asgard con
sus Bronze Saints, Pegaso y Andrómeda. El cosmos puro y caluroso de Atenea
le hizo comprender que había hecho la buena elección, y Flare no dudó
cuando se encontró frente a Hilda y sus guerreros divinos, aceptando ser
considerada traidora infame. Inconscientemente, trató de convencer a su
hermana a renunciar a sus intenciones, asistiendo llena de amargura a
la confrontación entre los God Warriors y los Bronze Saints en vano.
Luego,
al ver el anillo en el dedo de Hilda, Atenea lo reconoce como el anillo
de los Nibelungos, capaz de subyugar la voluntad de quien lo lleva, y
supuso que Hilda era prisionera de una fuerza maligna. Ahora que el comportamiento
extraño de su hermana había quedado claro, Flare esperaba que los Caballeros
de Atenea lograran salvarla antes del deshielo. Para evitar ese riesgo,
Atenea decidió someterse al clima glacial de Asgard para orar a Odín,
sabiendo que no iba a sobrevivir a la noche. Impresionada por su espíritu
de sacrificio, Flare decidió quedarse junto a ella para orar con el pequeño
Kiki, un aprendiz que acompaña a los caballeros.
Unas
horas más tarde, Kiki tuvo una visión de Hyoga luchando en una cueva volcánica.
Flare comprendió que luchaba contra Hagen y desesperada corrió hacia alli
preocupada por la vida de ambos. Cuando finalmente llega a la cueva, encontró
a Hagen listo para acabar con la vida de Hyoga, y logra detenerlo. Flare
trata de hablar con Hagen de Hilda pero el guerrero, acechado por los
celos y la certitud que entre ella y Hyoga había algo, no escuchó sus
palabras y pensó que ella había sufrido un lavado de cerebro. Hagen decidió
cabar con el enemigo, pero Flare se colocó ante él para protegerlo con
su cuerpo.
Ahora
cegado por la ira, Hagen le pidió a Flare que se apartara, pero ella se
negó, decidido a no traicionar no sólo Hyoga, sino también al deseo de
paz en el que ella creía. A regañadientes Hagen cumple su deber y lanza
su golpe secreto contra la chica y Hyoga. El Caballero del Cisne logra
salvarla, pero la acción de Hagen reaviva el conflicto con toda su violencia,
presionando a Hyoga a darlo todo para obtener la victoria y la derrota
del enemigo. Herida y destruida por el dolor, Flare se arrastró entre
sollozos hasta que el cuerpo sin vida de Hagen, con quien estaban ligados
todos sus recuerdos, y se desmayó. Hyoga confia a la joven a Kiki, recién
llegado, quien la lleva a una cabaña en el bosque para curarla.
Al final de los combates, Flare, emocionada, vio como los diferentes caballeros
regresaban con Athena, y luego lo hizo Hilda. Encantada de que finalmente
pudiera abrazar a su hermana que la reconoció, Flare aceptó sin vacilar
su perdón. Su alegría fue sin embargo, barrida por el repentino ataque
de Poseidón, dios de los mares, que la secuestro y la arrastró a los abismos
submarinos. Flare comprendió que fue Poseidón quien hechizó con el anillo
de los Nibelungos a Hilda como parte de un plan complejo, que por desgracia
resultó en la muerte de todos los guerreros divinos del norte, incluyendo
a Siegfried.
Poseidón ya no era una amenaza para Asgard, defendido por la aparición
de la armadura de Odín, pero Flare e Hilda trataron de ayudar a sus salvadores,
y decidieron recibir en el palacio a los caballeros, y ayudarles a encontrar
una manera de llegar hasta el reino de Poseidón. Al final de sus investigaciones
tuvieron éxito, y les indicaron un lugar prohibido a los habitantes de
Asgard que conducía a los dominios de un gran rey.
Afortunadamente,
los Caballeros llevaron a cabo su misión y Poseidón fue derrotado. Feliz,
y con su propia fe en la justicia reforzada por estas experiencias, Flare
continuó su vida en Asgard.
Flare
es la primera en darse cuenta del cambio de Hilda, lo que no es de extrañar
dado que, como hermana, ninguna otra persona la conoce mejor que ella.
Freya comprende rápidamente que es posible recibir la ayuda de
los Saints de Atenea, siendo consciente que la manera real de ayudar a
Hilda es no seguir fielmente sus planes de conquista como hacen que los
God Warriors, sino tratar de liberarla de maldad que habita en ella, sea
lo que sea.
Este
personaje no existe más que en el anime y no debe ser confundida
con la Freya que figura en la segunda película de Saint Seiya.
Flare
parece compartir el carácter original de su hermana Hilda, llena
de bondad y justicia. Inocente, no comprende que Hagen pueda amarla pues
ella lo considera únicamente como una especie de hermano. También
vemos que no le falta valor, ya que corre directamente a la cueva donde
se enfrentan Hyoga y Hagen. Hagen es para ella un fiel amigo de la infancia
que compartió sus alegrías y juegos, incluso si parece que
Hagen guarda sentimientos de amor hacia ella, estos no han sido observados
por Freya. Hagen es un ser querido por Freya, y a ella se le rompe el
corazón cuando se arrastra agotada por el suelo para acercarse
a él una vez es derrotado por la Aurora Execution de Hyoga. Su
relación con Hyoga parece bastante amigable, aunque existe la posibilidad
de que una relación Hyoga-Freya sea un tema popular en los fanfics.
A
pesar de no ser una guerrera, la hermana pequeña de la princesa
Hilda (que ayudará a los protagonistas a que detengan a su, últimamente,
rara hermana) merece mención por su "conexión"
mitológica. Freyja, Frea o Freya significa Dama. Como la Freya
de la serie, era de carácter dulce y amable, pertenece a los Vanir,
una de las dos grandes familias de dioses que para los antiguos noreuropeos
existía. La otra era la de los Ases, a la cual pertenecían
Odín y Thor, que eran básicamente dioses guerreros, mientras
que los Vanir eran dioses más pacíficos, dedicados a la
fertilidad y la naturaleza. Y aunque en el pasado hubo una guerra entre
las dos familias divinas, Odín decidió adoptar a la joven
Freya (y a su hermano Frey) como símbolo de buena voluntad.
Fanart
de Jerome Alquie (Francia)
HERENCIA MITOLÓGICA
:
En
la mitología nórdica Freya era una diosa mayor, hija de
Njord y Nerthus (o Skadi), rubia, de ojos azules, era la más bella
de todas las diosas, diosa del amor, la belleza, la fertilidad, la fecundidad.
Esta diosa venerada por mucha gente también era reputada por su
juicio justo y su bondad. Ella era la hermana del dios Frey. Poseía
un collar mágico llamado Brisingegamen y una capa de plumas de
ave que le permitía volar, con la que se transformaba en un halcón.
Montaba en un carro llevado por dos gatos. Lloraba con lágrimas
de oro. Después de la guerra que opuso Ases y Vanes, permaneció
en Asgard en compañía de su padre y su hermano gemelo Freyr.
Enseñó a los Ases todos los secretos de magia que poseía.
Tenía el poder de transformar a los seres en animales. Después
de cada batalla Odin y Freya compartían los guerreros muertos.
Odin los acogía en el Valhalla, Freya en su castillo Sessrummir
en Folkvang. Se casó con Odr, concibiendo a dos hijos Hnoss y Gersimi.
Un día Odr desapareció. Freya lo buscó y desesperada,
se puso a llorar lágrimas de oro que, cayendo en el mar, se convirtieron
en ámbar.
La
joven hermana de Hilda no tiene nada de una diosa como el nombre que lleva,
con todo ella posee la belleza de las muchachas del norte como la divinidad
de su nombre. Sin embargo, llora a menudo como la leyenda, pero la relación
es muy poca.
CURIOSIDADES
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